No te adhieras a nada,
no interroges a los libros ni a tu prójimo.
Ten confianza; de otro modo, el infortunio
no dejará de justificar tus aprehensiones.
No te preocupes por el ayer:
ha pasado...
No te angusties por el mañana:
aún no llega...
Vive, pues, sin nostalgia ni esperanza:
tu unica posesión es el instante.
Omar Khayyam
1 comentario:
Vale, lo intentaré, pero aplícate el cuento tú también, maja ;-P
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